Seguro de coche a todo riesgo sin franquicia
El seguro de coche a todo riesgo sin franquicia, o simplemente conocido como a todo riesgo, es el más completo del mercado. Cubre tanto daños propios como a terceros e incluye diversas coberturas que te protegerán ante cualquier incidente. La prima de este seguro es elevada, aunque es la única cantidad de dinero que tendrás que pagar; en caso de accidente la aseguradora asumirá todos los gastos.
La característica más destacable de un seguro de coche a todo riesgo sin franquicia es que, en caso de que seas el responsable de un accidente, además de los daños causados a terceros, el seguro también cubre tus daños propios, ya sean personales o del vehículo.
En este caso, que sea sin franquicia significa que la aseguradora se hará cargo de todos los gastos derivados del accidente (a excepción de algunas situaciones como que el conductor dé positivo en alcohol y drogas, conduzca sin carnet o que el accidente haya sido intencional, entre otras). Tú no tendrás que pagar nada adicional a la prima.
Un seguro a todo riesgo puede incluir coberturas como las siguientes:
- Responsabilidad Civil Obligatoria
- Daños propios
- Robo e incendio
- Asistencia en carretera
- Rotura de lunas
- Vehículo de sustitución
- Defensa jurídica
- Reclamaciones de daños
- Asesoramiento en multas
- Seguro del conductor
- Retirada del carnet
Seguro de coche a todo riesgo con franquicia
En el caso de los seguros de coche a todo riesgo con franquicia, la aseguradora y el asegurado pactan qué cantidad de dinero pagará cada parte en caso de accidente. Es decir, en una situación en la que eres el responsable de un accidente, si has pactado que la franquicia sea de 400 euros, y los daños ascienden a 1.200 euros de gastos, la compañía pagará 800 euros y la cantidad acordada la asumirás tú.
Cabe recordar que esta franquicia solo se aplica a los gastos por daños propios; los daños a terceros quedan totalmente cubiertos por la aseguradora. Asimismo, la franquicia puede ser de diferentes tipos y aplicarse a la totalidad de las coberturas o solo a algunas.
Estos seguros también ofrecen una prestación completa, al igual que los a todo riesgo sin franquicia. La ventaja frente al seguro sin franquicia es que la prima es más reducida. Cuanto más alta sea la franquicia, más baja será la prima. Eso sí, en todo caso deberás pagar la cifra estipulada en caso de siniestro. Es una forma de que tanto aseguradora como asegurado ahorren dinero al pagarlo a medias.
Qué tener en cuenta a la hora de elegir un seguro con o sin franquicia
Muchas personas basan la decisión de contratar un seguro de coche con o sin franquicia en el precio, pero hay otros factores que son importantes y también hay que tener en cuenta. Veamos todos ellos:
Precio
La prima de los seguros a todo riesgo con franquicia es más barata. De hecho, cuanto más alta sea la franquicia, menos pagarás de prima. Pero, si tienes un accidente, deberás asumir parte de los gastos. Por ello, si te basas solo en el precio, esta es la opción más rentable si no tienes muchos accidentes. Aunque te recomendamos que tengas en cuenta los siguientes aspectos a la hora de elegir.
Antigüedad del coche
Es el elemento que más influye a la hora de elegir el tipo de seguro. Si tienes un coche nuevo, te conviene contratar un seguro a todo riesgo sin franquicia. Por ejemplo, durante los dos primeros años, el seguro te cubrirá el valor de lo que cuesta un coche nuevo. Si el coche tiene más años, quizá te convenga un seguro a todo riesgo con franquicia. Eso sí, a partir del quinto o sexto año del coche, ya no se recomienda el seguro a todo riesgo, sino uno a terceros.
Siniestralidad
El historial de siniestralidad también te puede ayudar a decidir qué seguro es mejor para ti. Si eres un conductor que suele tener accidentes, puedes repasar el historial y ver cuánto te ha costado la reparación de los gastos para ver si te conviene la franquicia o no. En este caso, generalmente lo ideal será un seguro a todo riesgo sin franquicia. Si por el contrario no sueles tener incidentes, uno con franquicia puede ser buena opción.
Condiciones de la póliza
El perfil del conductor (edad, siniestralidad, uso del coche, lugar de residencia, etc.) y las características del coche (antigüedad, tipo de coche, etc.) son factores que se tienen en cuenta a la hora de contratar la póliza. También es conveniente fijarse en qué franquicia se establece para ver qué seguro a todo riesgo es preferible para tu situación.
