¿Qué ventajas te ofrece un seguro de salud privado?
Son muchas las ventajas que te proporciona disponer de un seguro médico privado. Una de las más importantes es la rapidez, ya que la asistencia en los centros de salud privados es más rápida que en la Seguridad Social, con lo que te evitarás largas y enojosas listas de espera. No tendrás que esperar semanas para una atención rutinaria o meses para realizarte una determinada prueba. El horario y la disponibilidad de los diferentes médicos son también más amplios, lo que te proporciona más alternativas a la hora de solicitar citas. Todo ello se traduce en una atención más personalizada y de mejor calidad.
Otra de las grandes ventajas de poseer un seguro de salud privado es la gran cantidad de servicios y prestaciones que pone a tu servicio, desde los más básicos hasta los basados en la tecnología más vanguardista. Tendrás además a tu disposición un cuadro médico muy amplio y variado, integrado por acreditados médicos especialistas, a los que podrás acudir directamente, sin necesidad de pasar antes por el médico de cabecera. Esto aumenta tu capacidad de decisión, ya que podrás escoger libremente a aquellos facultativos que desees en función de tu confianza, lo cual es fundamental, ya que precisamente la confianza es indispensable para una óptima relación médico-paciente.
La gran mayoría de los seguros médicos te ofrecen además la posibilidad de acudir a centros médicos y hospitales ubicados en cualquier punto de España o incluso del extranjero. Esta ventaja se hace patente sobre todo en el caso de que realices viajes con frecuencia, ya sea por placer o por motivos laborales.
¿Cuáles son las ventajas e inconvenientes de la Seguridad social?
En cuanto a sistema sanitario universal, la Seguridad Social permite una atención generalizada que se extiende a todas las capas de la sociedad. Implica en este sentido una clara ventaja social, ya que supone una amplia cobertura para toda la población. Esto favorece que incluso las personas con menos recursos puedan tener acceso a una sanidad de calidad.
En el otro lado de la balanza, el principal inconveniente de la Seguridad Social es su gran saturación actual. Esto supone a veces un gran retraso a la hora de solicitar consultas, pruebas y diagnósticos. Incluso las consultas de cabecera cursan a menudo con esperas de semanas, por lo que puede suceder que para cuando te den la cita ya haya desaparecido tu dolencia o, lo que es peor, sea demasiado tarde para tratarla con éxito.
Seguro privado y Seguridad social, ¿se pueden tener los dos?
Muchas personas piensan que Seguridad Social y seguro privado son dos sectores enfrentados e incompatibles. Sin embargo, esto no tiene que ser así, ni mucho menos. De hecho, la sanidad pública y la privada, lejos de constituir una disyuntiva, pueden perfectamente combinarse, lo cual suele ser además la mejor opción.
El hecho de que tengas un seguro privado no te impide en ningún caso el acceso al sistema sanitario de la provincia a la que pertenezcas, puesto que esto último es un derecho reconocido a todos los españoles. Por tanto, puedes perfectamente contratar un seguro médico privado y, al mismo tiempo, acudir a la sanidad pública cuando así lo desees.
Coste de los seguros médicos privados y de la Seguridad social
En el caso de que suscribas un seguro de salud privado, su precio vendrá marcado por el importe de la prima, la cual tiene generalmente una periodicidad mensual. El precio de esta prima depende de varios factores, tales como el número de asegurados que haya en la póliza, su edad, lugar de residencia, cantidad y tipo de coberturas que contrates, existencia o no de copago, etcétera.
Por su parte, la Seguridad Social, pese a su vocación universal, tampoco es gratuita, sino que se financia a través de los impuestos y por adelantado. Dicho de otro modo, el Estado retiene la parte de tus ingresos que viene marcada por ley para cubrir con ella los gastos del sistema sanitario, hagas o no uso del mismo.
