Motivos para cobrar un seguro de vida
Contratar un seguro de vida es muy recomendable, ya que brinda una importante protección económica en caso de fallecimiento o incapacidad del asegurado, circunstancias ambas que repercuten de forma directa y negativa en la economía familiar. En algunos casos, no obstante, la aseguradora puede plantear dificultades o problemas para cobrar el seguro de vida contratado.
Algunos de los motivos que la aseguradora puede alegar para negarse a pagar la indemnización fijada en un seguro de vida serían los siguientes:
- Vencimiento de la póliza. Si has dejado de pagar las cuotas del seguro de vida dentro del plazo establecido, se produce el vencimiento de la póliza y el contrato deja de existir. En tal supuesto, los beneficiarios pierden el derecho a cobrar la indemnización y, además, todo lo pagado anteriormente queda a favor de la aseguradora.
- Fraude. La aseguradora puede también denegar el pago de la indemnización cuando detecta algún tipo de fraude por parte del asegurado o de sus beneficiarios. Uno de los fraudes más frecuentes es haber mentido sobre el estado de salud del asegurado previo a contratar la póliza.
- Muerte por suicidio. Los seguros de vida suelen excluir el suicidio para el cobro de la indemnización.
- Fallecimiento del asegurado provocado por el beneficiario. Si el beneficiario de un seguro de vida es quien causa voluntariamente la muerte del asegurado, la aseguradora no pagará el capital establecido.
- Incumplimiento de plazos. Existen unos plazos concretos para reclamar la indemnización de un seguro de vida. El incumplimiento de tales plazos podría dar lugar a que la aseguradora rechace el pago de la indemnización.
Cobrar un seguro de vida por fallecimiento
La gestión inicial para cobrar un seguro de vida por fallecimiento es notificar por escrito el deceso a la aseguradora en un plazo máximo de 7 días. Cada aseguradora establece un particular protocolo de actuación, aunque los documentos más habituales que te solicitarán son los siguientes:
- Un certificado de defunción expedido por el Registro Civil.
- La póliza del seguro de vida.
- Certificado de nacimiento del asegurado o su Documento Nacional de Identidad.
- Certificado del Registro de Actos de Última Voluntad y copia del último testamento o de la declaración notarial de herederos si procede.
- Identificación de los beneficiarios.
- Acreditación de haber satisfecho el Impuesto de Sucesiones y Donaciones.
- Si el fallecimiento fue a causa de un accidente, deberás presentar también el correspondiente atestado y certificado de las diligencias judiciales abiertas en su caso.
Cobrar un seguro de vida por incapacidad permanente total
Si en tu póliza de vida tienes incluida la cobertura de incapacidad permanente total, la aseguradora está obligada a pagarte la indemnización fijada en caso de que dicha incapacidad permanente te sea concedida. En tal situación, lo primero que debes hacer es notificar dicha circunstancia a la aseguradora con la que tengas contratada la póliza. Será requisito esencial para obtener la indemnización que aportes la resolución de invalidez dictada por un organismo oficial (generalmente el Instituto Nacional de la Seguridad Social).
Tras la presentación de dicha resolución y del correspondiente certificado médico, la aseguradora comprobará y determinará el alcance de la incapacidad. Si no hubiese acuerdo entre la compañía y el asegurado sobre este extremo, la decisión será sometida a peritos médicos.
Plazos para cobrar un seguro de vida
Una vez que, dentro del plazo establecido de 7 días, hayas comunicado a la compañía aseguradora el fallecimiento o la incapacidad permanente del asegurado, el plazo para reclamar el cobro de la indemnización estipulada es muy amplio: hasta 5 años.
Una vez solicitado dicho cobro y entregada la documentación pertinente, el artículo 18 de la Ley de Contrato de Seguro establece que la aseguradora dispone de un plazo máximo de 40 días para pagar la indemnización a los beneficiarios. Si dicha indemnización no hubiese sido pagada en un plazo de 3 meses a contar desde la fecha del fallecimiento o declaración de incapacidad, los beneficiarios podrán interponer una reclamación formal y la aseguradora estará obligada a abonar, además, intereses.
