Atropello a un peatón
Hay que tener en cuenta que la cobertura del seguro de coche puede variar según la compañía y el tipo de póliza contratada. Pero todos los seguros, hasta los más básicos, incluyen la cobertura de Responsabilidad Civil Obligatoria, que cubre los daños que se causan a terceros como consecuencia de un accidente de tráfico. Por tanto, si eres el responsable del atropello, esta cobertura puede servirte para compensar a la persona que ha sido atropellada por los daños y lesiones sufridos.
Aunque el seguro de coche cubre el atropello, debes saber que la cobertura de Responsabilidad Civil tiene límites. En la mayoría de los casos, la cantidad máxima que se puede reclamar es la cantidad que se indica en la póliza y, si el daño o lesión causados son mayores que esta cantidad, el conductor puede ser considerado responsable y tener que asumir los costos adicionales. Cabe la opción de que tengas contratada la cobertura de Responsabilidad Civil Voluntaria, que amplía el importe de la aseguradora.
Cabe destacar que esta cobertura solo cubre los daños a terceros, y no los propios. Es decir, si eres el responsable y no cuentas con la cobertura de seguro de accidentes (normalmente incluida en las pólizas a todo riesgo), los daños que sufras tú no estarán cubiertos.
Asimismo, hay que tener en cuenta que el seguro no cubre el atropello en todas las situaciones. Si el conductor causante del atropello circula sin carné, bajo el efecto del alcohol o las drogas o excediendo la velocidad permitida, entre otras situaciones reflejadas en la póliza, será él quien deberá asumir los daños en última instancia. Del mismo modo, si el culpable es el peatón, este no tendrá derecho a reclamar una indemnización.
Atropello a un animal
También puede surgir la duda de si el seguro cubre el atropello a un animal. Cuando se da esta situación, lo primero que hay que hacer es diferenciar entre si se trata de un animal doméstico (normalmente el perro) o cinegético (animal de caza como un jabalí, ciervo, etc.).
Si atropellas a un perro que va atado y por un lugar adecuado, el responsable serás tú, y la cobertura de Responsabilidad Civil cubrirá los daños causados al animal y/o a su dueño. Siempre y cuando no se trate de una situación excluida de la indemnización. Si el perro va suelto o por una zona por la que no debe, el que tendrá que hacerse cargo de los daños será el dueño del perro.
En caso de que sea un animal cinegético, la situación es más complicada. Si no existe señalización o vallas adecuadas o señalización, el culpable será el titular de la vía. Si se trata de una situación de caza colectiva, el responsable será el dueño del coto. En el resto de situaciones, normalmente el culpable será el conductor. La aseguradora se hará cargo de los daños a terceros, como el que sufran los ocupantes, pero no de los que sufra tu vehículo o tú, al menos que tengas la cobertura adecuada para ello.