¿Cómo funciona un seguro de vida?
El funcionamiento de un seguro de vida es muy sencillo. Se basa en que el tomador del seguro, que es la persona que lo contrata, paga una determinada cuota periódica a la compañía aseguradora, la cual a su vez abona a un tercero, llamado beneficiario, una determinada cantidad de dinero (capital asegurado) en caso de que se produzca el suceso que se asegura, que puede ser el fallecimiento (o la incapacidad sobrevenida) del asegurado o la supervivencia de este al concluir el tiempo estipulado en la póliza.
El importe de la prima periódica que deberás pagar al contratar este tipo de seguro de vida es variable y la forma de calcularla depende de tres factores fundamentales: la edad del asegurado, el historial médico de este en el momento de la contratación y la cantidad total de capital que desee asegurar. El pago de la prima suele ser anual.
Tipos de seguros de vida
Son varios los tipos de pólizas de seguro de vida que tienes a tu disposición, según quieras cubrir el fallecimiento de la persona asegurada (seguro de vida riesgo), su supervivencia durante el periodo de tiempo que pactes con la aseguradora (seguro de vida ahorro) o una combinación de ambas (seguro de vida mixto). Analicemos detenidamente cada una de ellas:
Seguro de vida riesgo
El denominado seguro de vida riesgo constituye el tipo de seguro de vida más común en el mercado. Esta clase de póliza cubre el fallecimiento de la persona asegurada, de tal modo que cuando esta muere, el beneficiario designado obtiene el capital estipulado en el contrato. Su objetivo es, por tanto, proteger al beneficiario en caso de que el asegurado falte.
No obstante, también puedes contratar un seguro de vida riesgo cuya cobertura sea la invalidez o la incapacidad del asegurado, lo cual resulta muy útil si eres autónomo o trabajador por cuenta ajena, pues te permite obtener una indemnización en caso de que por tales causas de invalidez o incapacidad no puedas seguir desempeñando tu trabajo.
Seguro de vida ahorro
El seguro de vida ahorro, llamado también de supervivencia, es aquel cuya finalidad es que el beneficiario obtenga un determinado capital o cierta renta en caso de el asegurado continúe vivo al finalizar la vigencia del contrato.
Este tipo de seguro de vida puede resultarte muy útil como complemento a la jubilación. De hecho, es frecuente contratarlo fijando precisamente como fecha de supervivencia la de la jubilación del asegurado.
Seguro de vida mixto
Se trata de una especie de seguro híbrido que combina, dentro de un mismo contrato, un seguro de vida de riesgo y otro de ahorro. De esta forma, el cliente queda cubierto en caso de fallecimiento, si bien en caso de que sobreviva a la edad que se fije en el contrato, podrá asimismo beneficiarse de las prestaciones contratadas. Obviamente, en caso de fallecimiento, serán los beneficiarios designados en la póliza los que reciban las indemnizaciones acordadas.
